Práctica X: Abstract de una posible propuesta innovadora de aplicación de las TIC en el aula

   El proyecto de innovación e investigación relacionado que plantearé consiste en enseñar a leer a los alumnos a través de la participación colectiva; además, para ello, emplearé diversos recursos TIC. Así, la propuesta pretende guiar a los alumnos en cada uno de las fases de la escritura (preparación previa del escrito, búsqueda de información, redacción, revisión, etc.). Para ello, y aquí se encuentra la parte innovadora de la propuesta, los alumnos trabajarán cada fase de manera colaborativa y a través de recursos TIC.
   En la fase de preparación previa del escrito, en primer lugar, los alumnos, de manera colectiva, plantearán los temas que desean tratar en sus escritos con una lluvia de ideas. Después, entre todos los temas propuestos, escogeremos los temas sobre los que deseamos escribir; todos deberemos escribir sobre los mismos temas.
   En segundo lugar, para trabajar la búsqueda de información sobre un tema, antes de escribir, los alumnos buscarán información en Internet sobre el mismo y la compartirán a través de algún marcador social, como Delicious o Diigo. 
   En la fase de escritura o redacción, cada alumno realizará su texto individual, pero, más tarde, estos textos serán compartidos en Moodle y cada alumno corregirá el texto de un compañero, siempre de manera respetuosa. 
   Tras ello, el docente corregirá los textos y, por último, planteará en un documento, en Moodle,los errores más comunes que han cometido los alumnos y algunas actividades para que reflexiones sobre los mismos. No solo eso, sino que además en clase haré una fase de revisión general proyectando en clase algunos de los errores más comunes para reflexionar de manera colectiva, colaborativa y conjunta sobre ellos.

   Palabras Clave: fases de la escritura, Moodle, colaboración, TIC.

Feliz y tecnológico año 2030

Ya han sonado las 12 campanadas, ya estamos a 1 de enero de 2030. Cómo pasa el tiempo, parece que fue ayer cuando estaba realizando el Máster de secundaria, momento en el que iniciaba el gran viaje de mi vida: nadar por las aguas de la docencia para aprender a ser lo que soy ahora. Por aquella época estábamos en 2014 y mi día a día siempre era el mismo: levantarme, desayunar,  hacer trabajos para la universidad, comer y coger el autobús para ir a la UA. Siete meses con esta misma rutina, viendo a los mismos conductores y el mismo paisaje entre Elda-Alicante a través de las sucias ventanas del autobús. ¡Qué lejos quedan esos momentos! ¡Cómo han cambiado las cosas!

SÍ, todo ha cambiado. Todo aquello que formaba parte de mi vida diaria ha ido desapareciendo poco a poco. Los coches y transportes públicos han sido sustituidos por tubos de cristal que nos teletransportan con tan sólo dar un botón, el cual forma parte de un panel donde se distinguen diferentes lugares. Los libros de texto, aquellos que usábamos en las clases, sólo están en el Museo del libro olvidado. Incluso, los ordenadores portátiles y tablets han dejado de existir.


Ahora todo es más tecnológico incluso que antaño. El presente me recuerda  a aquellos dibujos animados que veía por allá en los años 90 ¿cómo se llamaban…? ¡Ah, sí! ¡Los súpersónicos! ¿Os acordáis?
Pues mi vida diaria hoy en día es muy similar a la suya: me levanto, pido a la autococina mi desayuno, preparo la clase del día y me monto en mi teletransportador, que me lleva al aula donde debo dar clase, incluso, me lleva a mi silla de profesora. Allí, encuentro a mis alumnos, que al igual que yo llegan a través del tubo teletransportador. ¡Todo muy cómodo y económico, pues la gasolina también ha desaparecido!



Las clases también han cambiado.
Y, en vez de llevar los pesados libros de texto, portátiles o tablets, todos tenemos a nuestra disposición un pequeño proyector, que con tan  sólo un clic aparece un teclado, un ratón y una pantalla donde pueden ver los materiales correspondientes a la sesión. Ello permite que las clases sean más dinámicas, centradas más en la práctica y no tanto en la teoría. De hecho, sólo se destina un día de la semana a la clase teórica y en el resto de sesiones trabajamos destrezas lingüísticas.



Pero, os preguntaréis ¿cómo llegamos hasta aquí? Ya lo he dicho, todo ha cambiado…los políticos se dieron cuenta de la importancia de invertir en educación y dispusieron todo lo necesario para que los futuros científicos, profesores, médicos, etc., pudieran tener una buena enseñanza. 


¡Ya está aquí! ¡Ya llegó!

¡Gran estreno!

Desde el Laberinto de Ulises os presentamos nuestro book-trailer de La casa de los espíritus de Isabel Allende, obra propuesta para los alumnos de segundo de bachillerato y, por tanto, en la P.A.U.
Creemos que la presentación de un book-trailer como fase previa a lectura de la obra misma es un buena forma de incentivar y motivar la lectura, así como ser un buen recurso para el estudio.






Sin más dilación, os dejamos a continuación el vídeo, esperemos que os guste:


Y por si queréis profundizar un poco más en nuestro vídeo y las referencias que hemos utilizado, tenéis disponible también el trabajo escrito en el que hemos explicado todo el proceso, disponible en SlideShare.


Tic-Tac

Te despertaste sobresaltado, como cada mañana, por el recital de voces y estruendos de aquel infernal despertador vintage. La cabeza te estallaba y seguías teniendo ese horrible sabor a bilis en la boca. Puntual, el despertador volvió a recordarte, a las seis y diez, que tu día se repetía otra vez. Con tan sólo pulsar un par de botones tenías preparado aquel insípido desayuno, que tenías que culminar con un café del estraperlo para poder sobrellevar tu rutinaria rutina.
Tomaste el primer metro que se dirigía a las afueras de la ciudad. De tu viejo maletín sacaste un libro antiguo, de esos, pocos ya, que quedaban con páginas y olor a imprenta, a papel guardado y tinta reposada. Los transeúntes de aquel vagón que se desplazaba levitando gracias a un mecanismo magnético, que estaban absorbidos por sus pergaminos electrónicos que revolucionaron el mercado hace apenas año y medio, levantaron la cabeza atónitos, como si acabaran de descubrir por primera vez el fuego, ya extinto, del que sólo se puede disfrutar en los museos.
Ibas solo en el metro cuando llegó tu parada. Una mujer anunció por megafonía, en los tres idiomas que se hablaban en lo que quedaba de mundo, que la última parada llegaba: «Colegio de Saberes Leonardo Da Vinci». La puerta principal del centro estaba presidida por un gran escáner, de esos que había en los aeropuertos, que analizaba el ADN y comprobaba quién entraba y quién salía. Una vez dentro, recorriste los pasillos tortuosos y resplandecientes, desde donde se podía ver el interior de las aulas gracias a aquellos cristales opuestos, que dejaban entrar la luz a las aulas pero no permitían ver la realidad exterior.

Te paraste frente al aula de Historia, siempre te había fascinado cómo se aprendía la historia de la humanidad con esos cascos de ultrarealidad virtual. Con ellos puedes saber cómo fue la Primera Guerra Mundial o el viaje que realizó Colón a las ya desaparecidas Américas. Proseguiste tu camino hasta detenerte ahora en la clase de Educación Física, una asignatura que había sufrido múltiples mutilaciones y cambios, ya que ahora una mujer fofa y oronda se dedicaba a proferir gritos al ritmo de marcha militar mientras los alumnos realizaban una coreografía de artes marciales y defensa personal. La música y la pintura habían desaparecido, hace ya años, del sistema educativo. Los mandamases creían que corrompían el espíritu y formaban seres creativos y libres. Lo mismo había ocurrido con la informática y, como se denominó más tarde, las nuevas tecnologías. Durante los tres primeros años de vida, a los niños se les somete cinco veces por semana a una serie de radiaciones y ondas, todas ellas inofensivas, que les transfiere las habilidades y capacidades necesarias para poder utilizar cualquier dispositivo electrónico desde que empiezan a hablar.
Continuaste tu camino hasta el final del corredor, tomaste las escaleras que conducían hasta el sótano del edificio. Allí se encontraba tu pesadilla diaria. Tú, que siempre habías soñado enseñar a los más jóvenes a escribir, a hablar, a expresarse con solvencia, ahora te resignabas a llegar puntual a un aula semivacía de adolescentes hormonados. Tu trabajo consistía en pulsar un botón que recitaba, con una voz metalizada y resonante, los versos arcaicos de los poetas del siglo pasado. La clase de lengua se había convertido en algo mecánico y repetitivo, donde no existía la participación ni la interacción de los estudiantes. Y todo ello debido al descubrimiento de la tecnología intradérmica, que permitía introducir millones de microchips y placas base con infinidad de contenidos. Eso sí, esto sólo estaba al alcance de muy pocos bolsillos.
Para los pocos que aún asistían al colegio, tú eras un mero intermediario entre los conocimientos básicos y su futuro. Los días se te hacían cada vez más largos. Una copia del anterior. Lo mismo cada día. Lo mismo cada. Lo mismo. Lo. La rutina se iba extendiendo por tu vida tan deprisa, que a veces creías que todo esto no era verdad.
Al finalizar tu jornada, volviste a casa en el mismo vagón de todos los días, el penúltimo, y te sentaste el mismo asiento de siempre, el que va de frente, en el lado izquierdo. Leíste las mismas páginas que habías leído hace exactamente un día. Bajaste, puntual, a las veinte y veinte. Subiste por las angostas escaleras de tu ruinoso edificio, que se mantenía bailando sobre un pie, hasta el último piso.

Tic-tac. Tres vueltas a la cerradura. Tic-tac. El maletín en la entrada. Tic-tac. Las llaves en el cuenco. Tic-tac. La comida del gato. Tic-tac. El televisor con las noticias. Tic-tac. Los ojos que se cierran. Tic-tac. El balcón con las plantas. Tic-tac. La noche callada. Tic-tac. La brisa calmada. Tic-tac. El abismo que aprieta. Tic-tac. Las horas que pasan. Tic-tac. Al borde de la barandilla. Tic-tac. Uno. Tic-tac. Dos. Tic-tac. La vida se acaba.

Sobresaltado te despertaste. Miraste el móvil. Las cuatro y media. Todo había sido un sueño. Por fortuna o por desgracia nada había cambiado. La rutina imperaba en tu vida pero te llenaba, la educación continuaba siendo la misma y los mayores avances que se habían conseguido era implantar las pizarras digitales e informatizar todos los centros. Aliviado, te volviste a dormir. Seguía siendo mayo de 2030.

Quino, Premio Príncipe de Asturias

Mafalda, la pequeña gran Mafalda, con su ironía característica ha conseguido que su autor, Quino, recibiera esta misma semana el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades. Varios son los motivos por los que ha sido elegido entre varios candidatos; entre otros motivos, según el periódico El Mundo, fue decisivo el hecho de "haber combinado con sabiduría la simplicidad en el trazo del dibujo con la profundidad de su pensamiento".
    A continuación, presento algunas viñetas de Mafalda relacionadas con la educación y con la tecnología.

 ► Tecnología:

A) Bien utilizada, la tecnología no afecta negativamente a nuestras vidas.


► Educación:

A) La educación actual no motiva al alumnado a ser creativo y a utilizar sus capacidades para aprender.

B) La educación actual no nos enseña contenidos realmente importantes para el tipo de sociedad en la que vivimos.


C) La educación, en general, no está bien planteada.



- Al final, será mejor no perder la esperanza y pensar
que todo mejorará con el tiempo:

Hackeando la ciudad


El próximo 27 de mayo sale a la venta el juego Watch Dogs, y desde Ubisoft se han propuesto darle la mayor publicidad posible. ¿Cómo lo han hecho? Realizando una cámara oculta en la que vienen a explicar la situación en la que se encuentra el protagonista del videojuego, Aiden Pearce, que es un hombre capaz de apagar semáforos, desconectar la red eléctrica y hackear coches y cajeros. Y todo ello lo puede hacer con su teléfono móvil. Diferentes medios, como El País o el Diario Información, han recogido la noticia del próximo lanzamiento, haciéndose eco dela repercusión que puede llegar a tener la situación planteada por Ubisoft.

Desde la propia compañía definen el videojuego de la siguiente forma:
Ambientado en Chicago, donde una red central de ordenadores conecta a todo y a todos, Watch_Dogs explora el impacto de la tecnología en nuestra sociedad. Usando la ciudad como arma, te embarcarás en una misión personal para administrar tu propia justicia.
¿Llegará la tecnología a tales extremos? ¿Estará todo el mundo conectado? ¿Habrá alguien que sea capaz de controlar todos y cada uno de los componentes electrónicos?
Tal vez aún quede mucho para poder contestar a estas preguntas. O tal vez no, porque ya hay hackers capaces de hacer todo lo que se muestra en la cámara oculta.

Mientras esperamos sentados frente al ordenador, el móvil o el televisor a ver qué es lo que nos deparará el avance tecnológico, os dejo el vídeo de la cámara oculta para que paséis un buen rato y reflexionéis, por qué no, sobre lo que subyace en la broma.


Para los que tenéis el inglés un poco más oxidado, os pongo en situación: las "víctimas" de la broma van a una tienda en la que se reparan móviles, y es ahí donde el informático les instala una app con la que pueden controlar luces, semáforos y abrir coches.

Se regalan versos

Os presento a continuación un vídeo en el que recito el poema de Nicolás Guillén 'Canto negro', de su poemario Sóngoro cosongo. En el siguiente enlace podéis leer el poema.



La primera vez que escuché este poema fue en el disco de Joaquín Sabina Dímelo en la calle, concretamente la canción "Ya eyaculé", en la que combina los ritmos cubanos con una letra sugerente; y utiliza, además, diversos poemas de Nicolás Guillén, como el que recito en el vídeo de arriba. Para que disfrutéis tanto como yo con esta fabulosa canción, os dejo el tema a continuación:


Bola extra. Y como no es oro todo lo que reluce, y no es que sea yo precisamente un genio de a interpretación, os presento otro vídeo, éste una de las tomas falsa que se han producido durante la grabación.


Día de Internet (¿Internet = Biblioteca y Laberinto?)

        Hoy día 17 de mayo se celebran varios acontecimientos: el Día de Internet y el día Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información. Así, hacemos una mención a ambos días puesto que la invención de Internet, como todos sabemos, cambió nuestra forma de ver el mundo y la estructura de la sociedad en la que vivimos. Así, por la importancia de este recurso, ahora le haremos honor relacionándolo con dos metáforas literarias.

  1) Es Internet como LA BIBLIOTECA de Borges:

     “El universo (que otros llaman la Biblioteca) se compone de un número indefinido, y tal vez infinito, de galerías hexagonales, con vastos pozos de ventilación en el medio, cercados por barandas bajísimas. Desde cualquier hexágono se ven los pisos inferiores y superiores: interminablemente. La distribución de las galerías es invariable. […] Una de las caras libres da a un angosto zaguán, que desemboca en otra galería, idéntica a la primera y a todas […]. Por ahí pasa la escalera espiral, que se abisma y se eleva hacia lo remoto. En el zaguán hay un espejo, que fielmente duplica las apariencias. Los hombres suelen inferir de ese espejo que la Biblioteca no es infinita (si lo fuera realmente ¿a qué esa duplicación ilusoria?); yo prefiero soñar que las superficies bruñidas figuran y prometen el infinito... […] Hay dos en cada hexágono: transversales. La luz que emiten es insuficiente, incesante”.
- Jorge Luis Borges
  2) Es Internet EL LABERINTO del Minotauro o, quizás, el de Borges:

No habrá nunca una puerta. Estás dentro
y el alcázar abarca el universo
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.

No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
que tercamente se bifurca en otro,
tendrá fin. Es de hierro tu destino
como tu juez.

                                - Jorge Luis Borges

                
           Borges laberinto from caminante30

Práctica VIII: La educación en 2030

Suena el despertador… legañas, sopor, hastío. Abro los ojos… abro lo ojos… y ya está, simplemente abro los ojos y devoro un vaso de agua, pues apenas tengo comida que echarme a la boca; mejor no pensar en ello. Doy vueltas por entre los muros de mi casa, pensando cuál sería el mejor modo de poner el pie en la calle… y no me atrevo a otear el cielo por entre la ventana, no quiero ver reflejado en él la tierra para la que sirve de bóveda…

Abro los ojos… y busco, busco y rebusco en el recóndito de mi ropero… no tengo con lo que tapar mi famélico… apenas un jirón de aquella camisa que tanto me gustaba y que ahora solo son hilos, hilos… hilos… Pero ahí está, aún está allí… en el fondo del ropero… aquel espejo roto; medito, pero, aun así, meditabundo, me acerco a aquel añico espejo y miro mi rostro… hace tiempo que no lo veía… que diferente me encuentro, ¡qué diferente!


         Abro los ojos y salgo a… al campo de batalla… ¿quién hubiera pensado que ese parque que se levantaba majestuoso ante mis ojos cada mañana ahora fuera una selva amazónica? ¿Quién iba a decir que cada calle, camino de un destino rutina, fuera ahora camino agujero, camino abrupto? Son las calles… calles abrojos… calles rotas todas… calles de esta ciudad alambre antiguamente gloria dorada, antiguamente fábricas ardiendo progreso, gentío inundando inconscientes las calles, desperdiciando el tiempo con oro… calles rotas, todas rotas… calles dunas ladrillos inmensas, calles pájaros vísceras por entre las baldosas, por entre los tejados partidos mil pedazos… calles cloacas, calles ratas devorando pájaros… sopla el viento…
          
  Sopla el viento, abro los ojos… y vuelvo a razonar… qué mal me sienta salir ahí fuera… y sigo camino paso a paso, pisando hacia el cadalso… al menos el condenado sabía qué le esperaba… en nuestro caso ya no queda verdugo que nos corte la cabeza… solo la incertidumbre de que será lo que nos mate cada segundo que va cayendo entre los relojes que aun funcionan… sigo mi camino… cerrando los ojos para intentar quedarme ciego y poder caminar a tientas por este mundo escombro…

          Sigo mi camino… y llego a aquella tienda destartalada… aquella en la que solía ir a comprar aparatos que no servían para nada… y en el escaparate, sorprendentemente intacto, un almanaque… 2024… aquel año fatídico… en el que tu mejor amigo podría haber sido la fiera que hubiera devorado la cuenca de tus ojos… aquel año en el que a todos nos crecieron colmillos y garras para jugar a la ley del más fuerte…

Os preguntaréis ¿qué ocurrió? Nos comimos el fruto de nuestras propias manos… no quedaron recursos para todos… los unos eran fuertes, los otros débiles; lidiamos entre nosotros mismos para ganarnos un trozo de pan que nos diera fuerzas para seguir luchando; vivimos tormentas… tormentas de miseria y de crueldad… los poetas se sacaron los ojos, cual Edipo, ante la aberración que tuvieron que presenciar… 6 años de miseria, pobreza… pero ya pasó…

Ya pasó… solo quedamos unos pocos… fuimos hombres, después fieras… y ahora no sabemos lo que somos… almas en pena… en las que solo quedó una cosa, la esperanza de construir un nuevo destino.
                                                               ...
                                                               ...

Debemos caminar ya por el año 2030… y sí, soy maestro… maestro de lengua y literatura… para educar a la verdadera esperanza de estas fieras inhumanas que destrozaron el mundo… a la única esperanza… los niños. Acudo cada mañana a clase… aunque me cueste caminar entre escombros, escombros, escombros, escombros, escombros… Al fin llego a clase… ya no se trabaja por competencias ni se evalúa a los alumnos… ahora, ahora los maestros que hemos sobrevivido solo queremos educar a nuestros niños para que sepan vivir entre escombros, para que disfruten del día a día, para que sean personas respetuosas, solidarias, amigas… para que dejen de ser las fieras que fueron sus ancestros…

Tuvo que caer la catástrofe para conseguir una educación en valores puros y en la que los docentes son los que verdaderamente construyen el aprendizaje moral de sus alumnos… en la que nada es impuesto y en la que se obtienen siempre buenos resultados, pues no importa cuánto sepan nuestros alumnos, sino que lo verdaderamente importante solo es educarlos en valores humanos, que crezcan, convertirlos en las bases de una nueva sociedad humana.

Nos centramos en la lengua oral, en el trato con los demás… en escuchar, sobre todo en escuchar a los demás… y en hablar de poesía, en leer los libros que han perdurado a pesar del tiempo… nadie podría destruir la poesía. Sí, sobre todo hablamos de poesía en nuestras clases, para conseguir que nuestros alumnos tengan consuelo, vida, sueño, añoranza, esperanzaesperanza

Abro los ojos… arranco el almanaque en un arrebato de añoranza… y sigo mi camino… Al fin llego a la escuela… y ahí tengo a mis alumnos, siempre agradecidos de enseñarles a crecer… un grupo de 15 alumnos (¡qué lejos quedan aquellos grupos en los que los niños se hacinaban unos encima de otros por exceso!). Y comienzo a hablar de poesía… poesía, poesía y más poesía… y literatura:
- El Lazarillo: luchar por una vida mejor.
- El Quijote: luchar por vuestros sueños.
- La Celestina: repudiad la avaricia, la riqueza.

         ¡Qué lejos quedan también aquellas clases en las que lo importante era solo saber que Melibea era Melibea y que Calisto era Calisto; en las que Alonso Quijano era Don Quijote de La Mancha o no se quería acordar! No aprendemos contenidos, ahora solo aprendemos a ser humanos, a crecer, a luchar…

      La Catástrofe nos ayudó al fin a conseguir una educación en valores, una educación basada en nuestros alumnos y no en un número. Una educación en la que lo importante es hacer crecer a nuestros alumnos, no insuflar en su cerebro información excesiva. Al final de aquella clase, cogí aquel almanaque y lo colgué en una pared derruida de aquella escuela.

A pesar de los problemas, siempre hay esperanza, siempre es posible un cambio. Hoy, en 2030 y hasta el fin de los tiempos.

Hoy Lunes... empieza un nuevo camino (Y Google Maps)

Ítaca

Cuando emprendas tu viaje hacia Ítaca
debes rogar que el viaje sea largo,
lleno de peripecias, lleno de experiencias.
No has de temer ni a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni la cólera del airado Posidón.
Nunca tales monstruos hallarás en tu ruta
si tu pensamiento es elevado, si una exquisita
emoción penetra en tu alma y en tu cuerpo.
Los lestrigones y los cíclopes
y el feroz Posidón no podrán encontrarte
si tú no los llevas ya dentro, en tu alma,
si tu alma no los conjura ante ti.
Debes rogar que el viaje sea largo,
que sean muchos los días de verano;
que te vean arribar con gozo, alegremente,
a puertos que tú antes ignorabas.
Que puedas detenerte en los mercados de Fenicia,
y comprar unas bellas mercancías:
madreperlas, coral, ébano, y ámbar,
y perfumes placenteros de mil clases.
Acude a muchas ciudades del Egipto
para aprender, y aprender de quienes saben.
Conserva siempre en tu alma la idea de Ítaca:
llegar allí, he aquí tu destino.
Mas no hagas con prisas tu camino;
mejor será que dure muchos años,
y que llegues, ya viejo, a la pequeña isla,
rico de cuanto habrás ganado en el camino.
No has de esperar que Ítaca te enriquezca:
Ítaca te ha concedido ya un hermoso viaje.
Sin ellas, jamás habrías partido;
mas no tiene otra cosa que ofrecerte.
Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado.
Y siendo ya tan viejo, con tanta experiencia,
sin duda sabrás ya qué significan las Ítacas.

Hoy Lunes empieza un nuevo camino… continúa la aventura. Éste sería el mensaje que querría transmitir a mis alumnos con el poema de Kavafis, al mismo tiempo que pretendo que conozcan algo de la tradición literaria clásica, como La Ilíada y La Odisea.  Por lo tanto, plantearía este poema a mis alumnos para que conozcan la literatura clásica, puesto que creo que esencial conocer nuestros orígenes para poder entender la modernidad y, más concretamente, la literatura moderna.
Con este poema, además, podría introducir la temática del viaje en la literatura, para que los alumnos observen que la literatura se desarrolla a lo largo del espacio y que las obras no son estamentos cerrados. Así, trataría la temática del viaje en clase, desde La Odisea hasta la generación del 98’, como, por ejemplo, Camino de perfección de Pío Baroja, pasando por los destierros del Cid y por el exilio de autores como Benedetti.
Por último, con este poema no solo pretendo impartir clases de literatura, sino transmitirles ideas optimistas para que empiecen la semana con ganas y para que sepan que la literatura les sirve para viajar y para encontrar apoyo moral.Además, con esta entrada hacemos honor al título de nuestro Blog, "El Laberinto de Ulises".
Tras ello, plantearía una actividad amena y divertida a los alumnos, que posiblemente les motive a trabajar la literatura con más entusiasmo. Les plantearía, por ejemplo, que escogiesen una obra o la vida de un autor caracterizada por el hecho de tener varios viajes (si no se les ocurre ninguna, las plantearía yo). Tras ello, les diría que planteasen el itinerario de la obra o del autor a través de un recorrido por Google Maps. He aquí un ejemplo de uso de Google Maps con este objetivo.

Los niños de Nunca Jamás

El pasado día 9 de mayo se inauguró, en Busot, la exposición "Los niños de Nunca Jamás", de Jordi Ochando (aka Art Flynn), mi primo. Los diferentes cuadros, dibujos y esculturas vienen a reflejar cómo afecta el paso de la niñez a la madurez, en tanto que la imaginación y la creatividad se pierden cuando nos hacemos mayores. Por ello, tenemos que ir en busca de nuestros sueños y aspiraciones, conseguir aquello que queremos y no rendirnos jamás, cueste lo que cueste.

Desde aquí, y haciendo un poco de propaganda familiar, os invito a que os paséis por la Casa de la Cultura de Busot y disfrutéis de la exposición. Es impresionante, y no porque sea mi primo, sino porque realmente son buenos y te hacen volver a la infancia, a descubrir nuestra imaginación y disfrutar con los colores.

Os dejo, además, la dedicatoria que le escribí en libro de firmas de la exposición,  fruto de las musas y el afecto.
ODA A LA IMAGINACIÓN
Amarillo, magenta, cián,
no importa el qué dirán.
Piensa, dibuja, imagina,
tus sueños están a la vuelta
                     [de la esquina.
No dejes de ser un niño de Nunca Jamás.

Bola extra. Como hoy es lunes y como esta entrada se la estoy dedicando a mi primo, aquí va mi recomendación musical para la Canción de los lunes. Aunque más bien es una recomendación de primo, que fue él quien me aconsejó escuchar Cuarteto de nos, un grupo uruguayo. La canción de hoy es "Cuando sea grande", que es una reflexión sobre qué queremos ser en la vida.


P.D. Seguid su página de Facebook --> Art Flynn <--

Marcadores sociales

Tras la larga espera, ¡por fin llega nuestro trabajo acerca de los Marcadores sociales
Con anterioridad, ya habíamos presentado una infografía del tema y, ahora, os facilitamos tanto el trabajo redactado como el Power Point. Si aún no conocéis estas herramientas, podéis entrar en ellos para ver los tutoriales sobre los tres marcadores sociales más usados. Asimismo, si en un futuro queréis llevar al aula esta herramienta, no dudéis en consultar nuestra propuesta didáctica, la cual está desarrollada desde la perspectiva de futuros docentes, por lo que está llena de ilusión, imaginación y creatividad.

Sin más dilación, desde El laberinto de Ulises esperamos que los siguientes archivos os sean útiles y aprovechéis bien la información que en ellos hay.  

Las hermanas Salazar son inmigrantes

El ya mítico grupo español de finales de los ochenta Azúcar Moreno, formado por Toñi y Encarni Salazar, que se han separado y vuelto a juntar por enésima vez, son inmigrantes. Así lo confesaron en su tema Sólo se vive una vez, de 1996, en el que hacen una reflexión sobre el sentido de la vida, dejando en un segundo plano su verdadera identidad. Para que lo comprobéis vosotros mismos, os dejo a continuación el tema Sólo se vive una vez:


Pero no nos engañemos, las hermanas Salazar son del mismo Badajoz. Hablo de un tipo distinto de inmigración: son inmigrantes digitales, porque ¿quién en su sano juicio utiliza el término 'transistor'? A base de un ritmo pegadizo y una letra que levanta el
ánimo con versos como "dale al cuerpo vacilón, ¡qué caramba!", Azúcar Moreno oculta su abnegación tecnológica ya en los noventa. Aunque en pleno siglo XXI el asunto no mejora, ya que en Twitter pasan desapercibidas, sin llegar a los mil tuits.




Bola extra. Espero que os hayáis tomado esta entrada con humor e ironía, porque no hay nada mejor para empezar la semana que hacerlo con una sonrisa en la cara. Asimismo, este post está relacionado con mi última publicación, para que mis seguidores más fieles (nótese de nuevo la sorna) vean la diferencia entre nacer en una época y en otra, en la que el abismo tecnológico es inmenso. Disfrutad del día.

Nativos digitales, definición gráfica

Hace unas semanas, mientras navegaba por Facebook, me sorprendió una noticia que publicaba el periódico Información, que la compartía a través de su página en la red social. La noticia se titula Los niños reaccionan ante un Walkman: "¿Qué es esta cosa?", que viene acompañada del siguiente vídeo (7:22):


Os recomiendo que veáis el vídeo, que aunque esté en inglés se pueden activar los subtítulos (también en inglés, lo siento) y seguir fácilmente las reacciones de los niños. No tiene desperdicio. Las caras de los pequeños son delatadoras, y lo son más aún sus comentarios: no tienen ni idea de lo que tienen delante, algunos dicen sentirse «como Indiana Jones o algo», incluso un niño asegura que es más fácil escuchar música en un Walkman que en el iPad (por el hecho de tener que encenderlo, meterte en internet, buscar la aplicación y pulsar sobre lo que quieres escuchar).

Sin lugar a dudas, estamos siendo testigos de los pasos de gigante que da la tecnología, tanto, que niños de ocho y trece años no tienen ni idea de cómo usar un Walkman. Mi experiencia con este reproductor fue muy fugaz, lo reconozco, pero recuerdo aquellas tardes en las que me grababa cintas para llevármelas a la granja escuela.

Bola extra. A partir de este vídeo, he descubierto una gran cantidad de otros vídeos de los mismos autores, TheFineBros. Os animo a que naveguéis por los vídeos y descubráis más reacciones de niños, adolescentes, adultos... ¡y reacciones de gatos! Le he echado un vistazo al de los gatos y es absurdo a la vez que tronchante (José, te dejo el enlace, que sé que lo vas a buscar ;) ).